Sabor del fútbol real

El Cádiz que espera esta noche, en un día y bajo un horario inusual, una de las salidas más complicadas de pocos puede ofrecer el grupo IV de segunda B. El conjunto amarillo se presenta en Albacete con ecos de la selección española, dejando su encanto, en cuanto, a cerrar la brecha, saber la manera correcta de ser grande en el feudo de otro grande. Días más que nadie ha tenido Raúl Agné para preparar el desembarco de los Carlos Belmonte, pero esta ventaja que para el próximo choque es una desventaja, ha empañado con los problemas físicos de Kike López, que es la gran pregunta.

 

El encuentro en la capital castellano-manchega es de los que se encuentra señalado en rojo en el calendario antes de que la pelota comience a rodar. Un partido diferente, dos buenos conjuntos y, lo más importante, un escenario acorde a lo que hay en juego. Pocas veces el Cádiz se sentirá importante lejos del Carranza como le sucederá esta noche. Pero la grandeza también va acompañada del rendimiento y de lo que refleja la clasificación, ya que hay cierta necesidad de no perder para, al menos, escalar dos posiciones y regresar a la zona de play-off. Sería un buen broche a la octava jornada.

Sin embargo, la tendencia cadista en las manifestaciones de sus futbolistas ha ido en los últimos días por derroteros triunfalistas pensando en dar un golpe sobre el tepe del Belmonte para que tiemble el grupo IV al completo. Ir con mentalidad ganadora es la mejor manera de sacar un punto. El choque viene bien para retomar aquello tan utilizado de la botella medio llena o medio vacía. Si el Cádiz gana será segundo y nadie se acordará del Lucena y La Hoya Lorca; si empata, las sensaciones no podrían ser malas en un recinto tan complicado. Pero si pierde, a buen seguro que la inquietud tomaría posiciones y daría lugar a la tan temida pregunta: ¿Qué está pasando?

Tiempo, y mucho, ha tenido Raúl Agné para recuperar a la gente tocada y repasar una y mil veces las virtudes y los defectos de la escuadra de Luis César Sampedro. Aunque después de ganar horas a las horas para que gente como Airam, Perico y Mikel Martins retomaran fuerzas, el preparador aragonés no contaba con los problemas de Kike López, que sufre una contusión en una rodilla y es seria duda. Viajó ayer formando parte de los 18 jugadores que tiene disponibles -todos salvo el lesionado Tomás-, si bien está por ver las posibilidades de que salga de inicio e incluso de que juegue. Menos mal que Airam está plenamente recuperado y vale aquello de que 'las penas con pan son menos', pues el canario tiene argumentos y gol para ser el referente ofensivo.  

En cuanto a la alineación, todo apunta a Ceballos retomar su lugar en el lado derecho en lugar de Albert Dalmau, tras finalizar una reunión de castigo por expulsión en Lucena. Más adelante, el doble pivote parece destinado a Mikel Martins y Nafti, aunque Agne dio la sorpresa en Lucena - la última salida antes de la ahora - dar propiedad caída en lugar del tunecino.

La reacción del Cádiz, después de dos días sin ganar, pasa a través de Albacete, un sabor de escenario de fútbol.